Introducción:
Aquí en Good Shepherd tenemos la suerte de contar con grandes catequistas que comparten sus talentos y dones con la comunidad. Al inicio de la Misa, la familia se reúne para iniciar el servicio de adoración ingresando con un diálogo entre el sacerdote y la congregación. El sacerdote, que es el celebrante principal, invita al pueblo al culto diciendo primero el saludo: “El Señor esté con vosotros”, luego el pueblo responde diciendo: “y con tu Espíritu”. Una vez que el pueblo responde atentamente, entra en el Confiteor (acto de contrición) reconociendo primero la necesidad de pedir perdón por las veces que se ha pecado contra la caridad. A continuación, toda la congregación canta en voz alta el Gloria reconociendo el poder soberano de Dios en todo el servicio. Tan pronto como el pueblo deja de cantar, el sacerdote abre el cielo diciendo: “Oremos”, lo que se llama colecta.
Luego, el sacerdote invita a los niños a pasar al frente mientras un catequista se para frente al altar esperando a todos los niños. El sacerdote y el catequista suelen decir una oración por los niños recordando el versículo de las Escrituras cuando Jesús dijo: “Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos” (Mt. 19:14). Luego, los niños siguen al catequista hacia la capilla donde serán introducidos a la Liturgia de la Palabra. Por último, regresarán con sus familias durante el ofertorio.
La Mecánica del Ministerio:
La Liturgia del Señor para Niños es un ministerio maravilloso para aquellos que aman enseñar la fe y ayudar a los niños a comprender el significado de lo que celebramos en la Misa. Primero, los niños comenzarán con un himno, una oración inicial, un salmo responsorial y el Evangelio. En segundo lugar, el catequista utilizará parte del material, como ayudas visuales, para explicar a los niños el mensaje del Evangelio. Enlace de muestra
Generalmente, el método termina cambiando dependiendo de los catequistas en lo que más les conviene para involucrar a los niños con la Palabra de Dios. Finalmente, lo más destacado es ayudar a los niños a aprender cómo orar y por qué orar; participan ofreciendo sus oraciones abiertamente para nutrir la relación personal con el Señor.
Después de las matemáticas:
El objetivo de la liturgia infantil es ayudar a los niños a dialogar con sus padres sobre el servicio. Este ministerio les permitirá involucrar a los padres sobre las lecturas, la homilía y lo que aprendieron durante el servicio.
El horario:
La Liturgia de los Niños se ofrece durante todo el calendario del año escolar. Contamos con maravillosos voluntarios que son catequistas dispuestos a compartir su tiempo y talentos. Los servicios son los siguientes:
Si desea ser parte de este Ministerio y cree que Dios lo está llamando a servir a la comunidad, comuníquese con Norma Malone en normamalone@bellsouth.net.